martes, 2 de junio de 2009

Series del desencanto


Confesiones de un Vicioso


Hay días que me dan ganas de estar bajo los efectos del alcohol, pero esas ganas no me duran lo suficiente como para dar el siguiente paso, lo mismo ocurre cuando estoy meciéndome en la silla frente al computador y de repente me digo"que rico seria fumarme un cigarrillo" pero entrelazo las manos atrás de la cabeza para amortiguar un bostezo que termina junto con las ganas que tenia de fumar; Es probable que esas ganas sean el deseo de tener un vicio, pero un vicio que me haga ver mas feo de lo que soy no me llama mucho la atención, podría hacer una lista justificando las razones por las que no me embriago, pero de entre todas ellas haré referencia a que me aburre estar pendiente de mi comportamiento con las pocas neuronas que quedan activas después de haber ingerido alcohol. A propósito de las drogas (cuya prohibición parece mas un aliciente para su consumo) le veo sus inconvenientes, pues no me haría sentir bien consumir algo que se que esta ocasionando tanta guerra y muerte y sobre todo no me haría sentir bien sabiendo que con ese dinero estaría pagando el sueldo a la horda de asesinos, ladrones y pendencieros que abundan en los barrios y en el país. Probablemente me he vuelto complicado hasta para los vicios, pero de que los tengo, los tengo como los videojuegos, la música, la lectura, confundir todo, hacer las cosas mal y perder, pero debo confesar que se volvió un vicio el no beber, fumar y drogarme.




John Saenz